Canal y Bol dieron tintes morados a la segunda jornada con presencia en la fuga y en el esprint. En Portugal, el prólogo inicial situó a Molenaar como el morado más rápido.

Segunda etapa de la vuelta de casa y el equipo mantuvo su carácter luchador. En los primeros kilómetros Carlos Canal buscó la fuga junto a otros cuatro corredores, que con el consentimiento del pelotón rápidamente incrementaron su ventaja hasta los 6 minutos y 30 segundos.

La aventura de Canal sobre la nueva BH Aerolight puso en tensión al grupo principal y terminó a 30 de meta, a las puertas de la Sierra de la Demanda. Poco después, con ocho kilómetros por delante, Ángel Madrazo intento sorprender al pelotón con un ataque. En las calles de Briviesca, Jetse Bol mostró una vez más su ambición en el sprint masivo donde rozó el top-20. Con ello, el neerlandés escaló un puesto en la clasificación general, situándose así en séptima plaza.

En el pódium, Carlos Canal fue elegido como el corredor más combativo de la jornada tras su cabalgada en la cabeza de carrera de más de 130 kilómetros. El joven gallego reconoce que “ayer no fue un buen día, así que hoy he salido con intención de coger la fuga para recuperar sensaciones. Desde el inicio estuve atento a los cortes y pude entrar en la escapada de cinco corredores del día. Con buen entendimiento y bastante aire a favor se pasó el día muy rápido. En los últimos kilómetros intentamos echar un pulso al pelotón, que aceleró mucho y que nos cazó a 20 de meta. Muy contento con las sensaciones y espero seguir así lo que resta de la Vuelta a Burgos”.

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