El asturiano del Burgos BH buscó el triunfo desde la escapada en una etapa marcada por los continuos abanicos, que pone fin a la primera semana de competición en La Vuelta
La primera semana de La Vuelta concluyó con otro final en alto en el que el Burgos BH estuvo cerca de lograr la victoria de etapa. Dani Navarro acabó en octava posición, el mejor resultado de los morados en lo que va de carrera, tras formar parte de la fuga del día. El asturiano pudo entrar en el grupo de cabeza de ocho ciclistas tras un inicio de carrera que se disputó a un ritmo frenético. El viento de costado provocó abanicos desde la salida, rompiendo en varios grupos un pelotón que completó la primera hora de carrera a 54 kilómetros por hora de velocidad media.
La carrera se reagrupó en el ascenso al Puerto de Casas de la Marina, situación que aprovechó Dani Navarro para atacar. Junto a sus compañeros de fuga, logró una ventaja de hasta ocho minutos tras el descenso, lo que incrementaba mucho sus opciones de pelear por la victoria. Después del paso por Mula, volvieron a producirse abanicos en el pelotón, que volvió a rodar fragmentado y redujo la ventaja de los fugados a tan solo tres minutos.
Sin embargo, los dos pelotones principales se volvieron a unir a 50 kilómetros de la meta y el grupo de Navarro volvió a aumentar su renta. El veterano ciclista morado realizó un buen trabajo en los relevos y pudo salvar dos sustos en forma de pinchazos. Los ataques en cabeza no se hicieron esperar en la subida al Collado de la Cruz de Caravaca y Dani Navarro hizo un último esfuerzo para terminar en octava posición.